Madrid dará más facilidades a
todos aquellos emprendedores y comerciantes que deseen empezar su negocio y el
dar estas facilidades será el objetivo de la nueva Ordenanza de Dinamización de
Actividades Comerciales en Dominio Público, cuyo contenido ha sido pactado con
las asociaciones más representativas de comerciantes, hosteleros y empresarios
de la alimentación de Madrid. De la importancia del nuevo texto dan cuenta los
datos: va a beneficiar a 48.000 negocios minoristas que desarrollan su
actividad en calles, plazas y mercados municipales, y que facturan al año más
de 13.000 millones de euros.
Así según palabras de la
alcaldesa de Madrid, "Derogar normas obsoletas, eliminar trabas
administrativas e innovar en el ordenamiento para impulsar el crecimiento
económico". Éste es, en palabras de la alcaldesa, Ana Botella, el objetivo
de la nueva Ordenanza de Dinamización de Actividades Comerciales en Dominio
Público.
La consolidación de los mercados
municipales como lugares para emprender requiere agilizar la adecuación de
estos a los cambios en los hábitos de consumo, facilitar su capacidad de
respuesta a las nuevas demandas de la distribución comercial y simplificar los
trámites para la implantación en estos de nuevas actividades. Todo ello
redundara en un mayor atractivo de los mercados, tanto para los ciudadanos como
para futuros inversores.
Con este fin, la norma agiliza el
procedimiento de apertura de negocios en los 46 mercados municipales. Así, se
incorpora ‘la figura de la declaración responsable', para la implantación en
los mercados de las actividades que, conforme a la normativa específica, puedan
acogerse a este régimen.
Los comerciantes instalados en
estos equipamientos que se dediquen a la
venta de productos no envasados podrán crear zonas de degustación en sus
locales y, de forma agrupada, en los espacios comunes. De este modo, los
titulares de estos negocios podrán así habilitar una zona de su local con mesas
y servir refrescos y bebidas de baja graduación para que sus clientes puedan
consumir en él los productos comercializados.
Inspirada en el funcionamiento de
los coworkings para emprendedores, una de las aportaciones de la ordenanza es
que el titular de un local podrá ceder su uso a varios operadores
simultáneamente, de forma que se creen espacios de trabajo compartidos.
Colaboración público privada
Entre las novedades de la nueva
Ordenanza destaca la figura de las Zonas de Iniciativa Emprendedora. Estas zonas
siguen el modelo de colaboración público-privada en la gestión urbana que rige
en ciudades como Londres, Nueva York o Toronto. En el caso de Madrid, significa
que los empresarios de cualquier eje comercial, constituyéndose previamente en
Asociaciones Administrativas de Contribuyentes, podrán promover conjuntamente
actuaciones de promoción y dinamización comercial en el espacio público, así
como colaborar con la administración municipal en la prestación de servicios
que contribuyan a hacer más atractivo su
entorno.
Así, por ejemplo, los
comerciantes de una zona de compras que quieran instalar banderolas u otros
elementos decorativos en su calle a modo de reclamo podrán instar al
Ayuntamiento para que apruebe y recaude una contribución especial destinada a
financiar esta acción promocional.
Pero además de a estas Zonas de
Iniciativa Emprendedora, las autorizaciones especiales se podrán conceder
también a comerciantes integrados en mercados municipales o asociaciones que
desarrollen de forma agrupada su actividad fuera de sus locales y en espacios
de dominio público. Como ejemplo, Botella citó el caso de "una asociación
de comerciantes que desee organizar en una plaza una pequeña feria con
actividades para niños y casetas en las que vender sus productos a fin de
acercar a los vecinos la oferta comercial que hay en su barrio".
Comercio en los espacios públicos
Se adapta la normativa para dar
cabida en los espacios públicos a nuevas prácticas comerciales y acciones de
promoción. El Ayuntamiento podrá expedir autorizaciones especiales a los
comerciantes gestores de los mercados municipales, asociaciones empresariales o
zonas de iniciativa emprendedora, para que puedan desarrollar conjuntamente su
actividad en plazas, calles y otros espacios públicos.
En cuanto a la venta ambulante,
la regulación se mejora, al estilo de las grandes capitales del mundo, para que
pueda autorizarse la venta de determinados alimentos envasados en puestos
autorizados en la vía pública, siempre que se respete la normativa en materia
de higiene, sanidad, calidad y seguridad alimentaria. De este modo, el
Ayuntamiento a partir de ahora podrá licitar autorizaciones para que se
instalen, a modo de ejemplo, puestos de ensaladas y sándwiches alrededor de
estadios de fútbol.
Por otra parte, se regulan
expresamente los mercadillos sectoriales. El régimen de autorizaciones estará
sujeto a licitación que se ajustará
estrictamente a criterios de interés público, concurrencia y objetividad. Se
pretende así frenar la proliferación desordenada de estas actividades en
Madrid. La nueva regulación da respuesta a las peticiones de los empresarios
madrileños agrupados en torno a CEIM y sus asociaciones, por lo que la
normativa municipal evitará la competencia desleal y garantizará de forma más
eficaz la libre competencia.
Por último, la ordenanza mejora
el régimen jurídico a que están sujetos los quioscos de prensa, flexibilizando
algunas restricciones que pesan sobre estos situados y dando más facilidades a
sus empresarios. Entre las novedades, cabe señalar que se incrementa el tamaño
del quiosco estándar hasta 8 metros, con la posibilidad excepcional de llegar a
los 12; se permite que exhiban publicidad de carácter cultural, además de la
relativa a los productos que venden, y
se quitan las limitaciones que pesaban sobre la contratación de personal.
Para más información:
Ayuntamiento de Madrid
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.